Aunque podáis sentir rabia en cualquier lugar, debemos tener en cuenta que en vuestra expresión, esa rabia no se vuelva en vuestra contra.
El problema no está en sentir rabia si no en cómo la manejáis
Hoy vamos a hablar de la rabia de manera saludable: sin hacer daño a nada, ni a nadie, ni a ti. Sin acumularla y sin explotar. Diferenciando entre sentir y actuar. ¿Preparadas/os?
1) Primero vamos a hacer un cartel bien grande y bonito con el siguiente mensaje
TENÉIS DERECHO A SENTIR RABIA
pero
NO a haceros daño a vosotros/as mismos/as: golpeándoos la cabeza, tirándoos fuertemente al suelo, pellizcándoos, tirándoos del cabello, etc.
NO a hacer daño a nadie: mordiendo, empujando, pegando a los demás, ya sea tu amigo, tu hermano, tu madre, tu padre, etc...
NO a dañar cosas: rompiendo objetos o golpearlos fuertemente.
2) Después vamos a recordar entre todos las formas en que las personas dañan a otros/as , se dañan a sí mismos/as o a las cosas cuando se enfadan.
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