El juego es una de las experiencias más intensas en la etapa de la niñez; a través de él se aprende a compartir con otros dándose inicio a la vida en comunidad. Jugando la creatividad se desarrolla a tope y las emociones son intesas. Así, muchos de los buenos recuerdos de la infancia se relacionan con estos juegos, al igual que permiten el desarrollo de habilidades, actitudes y valores que perduran por toda la vida.
En la CiberCaixa Mallos hemos jugado mucho este verano pero además estamos aprendiendo que con cajas, bolsas, papel, cordel y otros materiales reciclados podemos construir nuestros propios juguetes y divertirnos un montón. Aquí os dejamos algunas ideas para que os divirtais como nosotros este verano.
¡¡Feliz verano!
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